Cuerpo Saludable

Este libro aporta una visión cuestionadora del actual paradigma de salud, que no brinda respuestas a los problemas crónicos y degenerativos. Se propone un abordaje alternativo, basado en el sentido común y en el concepto de ensuciamiento corporal como causa real y profunda de las enfermedades. Estimula a conocer las leyes biológicas que rigen nuestro maravilloso cuerpo humano y a respetar su inteligentísima fisiología. Está destinado a un público vasto: enfermos agobiados por padecimientos crónicos o degenerativos, personas interesadas en mejorar su calidad de vida y sobre todo a quienes están dispuestos a transitar el dignificante camino de la autogestión de la salud.

Lo que habitualmente llamamos enfermedad, es solo un síntoma del estado de desorden al cual hemos llevado a nuestro organismo. En sí mismo, el cuerpo humano tiene gran cantidad de maravillosos mecanismos para resolver problemas a los que puede verse sometido: excesos, carencias, toxicidad, etc. Pero nuestro moderno estilo de vida se las ha ingeniado para colapsar esa increíble armonía, malogrando la natural capacidad de adaptación a los inconvenientes.

Asumir esta realidad, representa el cincuenta por ciento de la solución de nuestros actuales problemas de salud. Y ese es el objetivo de esta publicación: que el lector comprenda cómo él mismo ha generado tal situación de desorden y -por sobre todo- cómo él mismo puede remediar tal problema, en la medida que retorne a los hábitos saludables que nunca debió abandonar.

En esto no hay misterios, ni tampoco soluciones mágicas. Los errores se generan principalmente por desinformación. En la medida que sepamos cómo opera la inmensa inteligencia corporal y comprendamos sus mecanismos, veremos que es muy sencillo jugar a favor (y no en contra) de nuestra propia naturaleza humana. Entenderemos que no habrá medicamento alguno que pueda resolver problemas, mientras no dejemos de boicotear nuestro organismo con hábitos que van en contra de las leyes naturales que lo crearon.

En este sentido es importante comprender que sólo el cuerpo es capaz de repararse, depurarse y curarse a sí mismo. Nadie cura, solo el cuerpo lo hace. Dijo alguien “la función de la medicina es entretener, mientras el cuerpo se repara”. Nuestra tarea se “limita” a quitar la “costra” vieja y no agregar nueva; basta con “no poner palos en la rueda” de la infinita inteligencia corporal. Esto viene ocurriendo desde hace millones de años en la vida terrestre y son leyes biológicas inexorables. Debemos confiar en la magia de nuestra biología y ser pacientes.

Inicialmente debemos comprender como funciona el mecanismo de la intoxicación cotidiana y el ensuciamiento corporal. Si diariamente incorporamos más tóxicos de los que podemos evacuar, no necesitamos ser científicos para entender que la acumulación de toxinas acabará por generar un colapso tóxico. Esa es la génesis profunda de la mal llamada enfermedad: desde un eccema hasta un cáncer, todo responde al mismo mecanismo de generación. Solo difiere el grado de toxemia y el órgano mediante el cual, nuestro organismo expresa su claudicación.

Para el correcto funcionamiento corporal es importantísimo el rol que cumple la correcta nutrición, pero de poco servirá una alimentación de alta calidad en un contexto de ensuciamiento corporal crónico. El mejor de los nutrientes puede ser mal aprovechado, como consecuencia de estar atrofiados los mecanismos de la química corporal, a causa del colapso tóxico.

La analogía con un automóvil puede ayudarnos a comprender mejor este concepto. Si su vehículo está carbonizado y fuera de punto, debido al uso de combustible incorrecto, seguramente usted haría limpiar el motor y cambiaría la calidad del combustible. ¿Serviría hacer sólo una de las dos cosas? Con el cuerpo pasa exactamente igual. De poco sirve una sola acción. Hay que depurar para eliminar la vieja escoria que impide el normal funcionamiento. Y también hay que cambiar la calidad del “combustible” para que no vuelva a “carbonizar” la estructura.

Una persona que decida recuperar por sí misma su natural estado de salud y equilibrio, debe abordar irremediablemente el trabajo depurativo como prioridad absoluta. Es evidente que si no comenzamos por “destapar” nuestros filtros orgánicos y moderar el nivel de toxemia, todo lo que hagamos en procura de la salud, perderá efectividad. Viceversa, cualquier práctica terapéutica se beneficiará de la tarea depurativa y de una nutrición no ensuciante.

Ejercer nuestro natural derecho a un óptimo estado de salud, se parece mucho a una mesa asentada en tres patas: todas deben estar fuertes y en equilibrio. Por ello, la tarea de limpieza orgánica se potenciará enormemente con un contemporáneo freno al ingreso de nuevas toxinas y aporte de los nutrientes esenciales que faltan. Trabajar separadamente cada aspecto, conspira contra una rápida recuperación de la salud y el equilibrio. Ojalá este libro sirva para estimular su inquietud por el trabajo depurativo y pueda brindarle elementos útiles para transitar el sendero de retorno al estado de plenitud que nunca debió resignar.

ACLARACIÓN IMPORTANTE

Dado que estas páginas tienen una visión cuestionadora del actual paradigma de salud y que no pueden ni pretenden reemplazar a la consulta médica, sugieren la actitud responsable por parte del lector.

Propiciamos la autogestión de la salud. Esta dignificante práctica, basada en la prevención y en el sentido común, requiere individuos informados y conscientes de su maravillosa estructura corporal. Fundamentalmente personas que asuman la plena responsabilidad sobre su calidad de vida.

Aquí brindamos una recopilación de técnicas, consejos y experiencias que hemos practicado exitosamente y sin mayores inconvenientes. Esto nos llevó a compartirlos con amigos, quienes también tuvieron resultados espectaculares y ausencia de efectos secundarios. Como consecuencia, surgió esta publicación, para difundir esas cosas útiles y lamentablemente poco conocidas.

Este libro intenta compartir experiencias y mostrar otra forma de ver las cosas. Entendemos que es el modo de ir reemplazando el viejo paradigma, mediante construcciones horizontales y colectivas. Ejemplo de esto son algunos sitios de la web, donde personas comunes que experimentan métodos alternativos, desafían con sus inquietudes y evidencias, el desconocimiento científico al respecto.

Cada uno es dueño de seguir (o no) estos consejos y recomendaciones, pero sin aferrarse a ellos en procura de certezas o verdades absolutas. Simplemente no existe la seguridad absoluta. Y eso es algo importante a tener en cuenta en este despertar a nuevas realidades, que debemos explorar en persona, por ser las primeras generaciones expuestas a un escenario nunca antes experimentado.

Somos minúsculos eslabones de un gigantesco flujo evolutivo. El flujo evolutivo es siempre cambiante, porque son cambiantes nuestros entornos y realidades. Por ello son necesarios nuevos abordajes y nuevos contextos adaptados a las nuevas realidades que nos rodean y nos desafían.

A la mayoría de las personas, estos cambios de hábitos y estas prácticas depurativas, les brindan resultados espectaculares, que los estimulan a profundizar el camino. Por cierto, los primeros síntomas suelen ser intensos (generalmente proporcionales a la cronicidad del problema) y muchos lo visualizan negativamente, cuando en realidad son altamente alentadores, pues indican que el cuerpo está movilizando su energía reparadora y curativa.

También puede haber quienes manifiesten algún problema puntual o quienes no sigan las indicaciones atentamente[1]. En realidad, los problemas son consecuencia del estado de toxemia crónica que afecta a la persona. Seguramente estos procesos patológicos, con o sin prácticas depurativas, iban a eclosionar igualmente. Un individuo con vesícula e hígado repletos de cálculos, indudablemente protagonizará una crisis en algún momento y por algún lugar.

Decimos todo esto, porque cada persona debe evaluar los riesgos potenciales de su estado. La asunción de riesgos es una decisión personal. Dicha responsabilidad nunca debe ser descargada en un libro, un método o un blog de la web. Éstos son solo medios que ponen al alcance de la gente, técnicas y visiones que funcionan y resuelven problemas a la mayoría; métodos que el sistema formal ignora, o lo que es peor, oculta.

Por cierto que lo ideal es estar siempre en manos de un buen profesional, con pericia y actualización en esta materia. Pero buscarlo es tarea individual. No nos dedicamos al trabajo terapéutico; solo difundimos y divulgamos experiencias propias y sobre todo a nivel de nuestra profesión, dado el rol trascendente de la nutrición en todos los problemas de salud.

Tampoco deseamos o sentimos que debamos convencer a nadie; cumplimos con mostrar un camino alternativo, práctico y eficiente. Ojalá que cada vez más profesionales del arte de curar tomen en consideración seriamente estos temas y asuman el desafío de alentar a sus pacientes a la práctica de métodos que realmente resuelvan patologías crónicas.

Néstor Palmetti
Técnico en Dietética y Nutrición Natural
Traslasierra (Córdoba), octubre de 2008

[1] Ver en lalimpiezahepatica.blogspot.com un testimonio de pancreatitis y otro de apendicitis, tras haber hecho limpieza hepática profunda y no haber seguido ciertas recomendaciones.

SUMARIO

CAPÍTULO 1: LOS ¿POR QUÉ?

¿Por qué necesitamos cambiar?
¿Por qué estamos mal?
¿Por qué nos resignamos a la mediocridad?
¿Por qué se degrada nuestra calidad de vida?
¿Por qué nos pasa lo que nos pasa?
Muletilla 1: es genético
Muletilla 2: son los virus
Muletilla 3: es el estrés
¿Quién esconde el manual de instrucciones?
¿No estaremos bajo un paradigma equivocado?
Reprimiendo, mutilando, cambiando pedazos…
¿Por qué no conviene resolver?
La ignorancia es lucrativa
El manual de instrucciones
Si funciona, sirve…
¿Por qué cuesta cambiar?
¿Por qué es importante limpiar y no ensuciar?

CAPÍTULO 2: ¿ENFERMOS O ENSUCIADOS?

Ensuciamiento corporal
El factor alimentario
El factor parasitosis
Consecuencias del ensuciamiento
Las conclusiones de Seignalet
Alimento fisiológico
Somos 99% monos
Adaptación no es normalidad
América precolombina y prandilogía
Una experiencia inédita y fugaz
Cocción y leucocitosis
La longevidad como consecuencia
Necesitamos cambiar paradigmas
El colapso tóxico
Problema y solución en nuestras manos
Negocio e irresponsabilidad

CAPÍTULO 3: TOXEMIA Y ENFERMEDAD

Renovación permanente
Célula, la unidad vital
Emuntorios, órganos depurativos
El terreno lo es todo
Toxinas internas
Toxinas externas
Toxinas de parásitos
Acidez y toxemia
¿Enfermedad o crisis depurativa?
Enfermedad aguda
Enfermedad crónica
La represión de síntomas
Enfermedad degenerativa
El ejemplo del cáncer
Nuevos conceptos sobre el cáncer

CAPÍTULO 4: EMUNTORIOS PRINCIPALES

LOS INTESTINOS

Funciones
El tránsito intestinal
¿Qué cosas afectan al tránsito intestinal?
- La carencia de fibra
- El moco alimentario
- La morfina cotidiana
- Las cuestiones fisiológicas
La flora intestinal
Fermentación y putrefacción
¿Qué cosas afectan a la flora intestinal
- El exceso proteico
- La falta de fibra soluble
- Los azúcares refinados
- Los aditivos conservantes
- El antibiótico cotidiano
- La candidiasis crónica
- Los parásitos intestinales
- Los fluidos digestivos
La mucosa intestinal
¿Qué cosas afectan a la mucosa intestinal?
- Las secreciones lácteas
- La candidiasis crónica
- Inflamación y antiinflamatorios
La candidiasis crónica
Síntomas comunes
Enfermedades que suelen encubrirla
Otra visión de problemas intestinales
Flatulencia
Divertículos
Colon irritable
Celiaquía
Apendicitis
Síntomas de malfunción intestinal
Diagnosis oriental
Técnicas de limpieza intestinal
Lavaje colónico
Limpieza con agua salada
Mini limpieza con agua salada
Enemas
Sales de magnesio
Los alimentos
Las fibras saludables
Los benéficos fermentos
- El chucrut
- El kéfir de agua
Otros nutrientes claves
Las hierbas
Otras recomendaciones

EL HÍGADO

Funciones
Síntomas de malfunción hepática
Hígado y emociones
Los cálculos biliares
- Síntomas de presencia de cálculos biliares
- Factores generadores de cálculos biliares
Técnicas de limpieza hepática
Limpieza hepática profunda
Enema de café
Limpieza con aceite de oliva
Los alimentos
Nutrientes y desintoxicación
Las hierbas
Otras recomendaciones

CAPÍTULO 5: OTROS EMUNTORIOS

LOS RIÑONES

Funciones
El exceso de fósforo
Síntomas de malfunción renal
Los alimentos
Las hierbas
Otras recomendaciones

LA PIEL

Funciones
Síntomas de malfunción dérmica
Técnicas de limpieza dérmica
Fricción seca
Baño de vapor
Baño hipertérmico
Emplastos
Trabajo físico
El curtido
Los alimentos
Las hierbas

LOS PULMONES

Funciones
Síntomas de malfunción pulmonar
Técnicas de limpieza pulmonar
Jadeo y canto
Los alimentos
Los almidones crudos
Las hierbas
Otras recomendaciones

SISTEMA LINFÁTICO

Funciones
Linfa y toxemia crónica
Síntomas del malfunción linfática
Técnicas de limpieza linfática
Tabla inclinada
Respiración profunda
Frotación de timo
Los alimentos
Las hierbas
Otras recomendaciones

OTRAS VÍAS DE ELIMINACIÓN

La lengua
Raspado matutino
La nariz
Ducha nasal
El oído
La toxemia energética
Técnicas de derivación

CAPÍTULO 6: LOS PARASITOS

Inevitables compañeros de ruta
Cómo nos llegan?
Daños que generan
La toxemia parasitaria
Defensa orgánica
Manifestaciones del daño
Signos y síntomas de parasitosis
- Piel y cabello
- Aparato respiratorio
- Aparato circulatorio
- Aparato ginecológico
- Sistema nervioso central
- Aparato urinario
- Órganos de los sentidos
Métodos de control
Testimonios significativos
Principales parásitos
Protozoarios (unicelulares)
- Giardias
- Trichomonas
- Amebas
Helmintos (gusanos)
- Ascaris
- Oxiuros
- Tenias
- Fasciolas
Enfermedad y control mental
Síntomas causados por parásitos
¡Al control mental lo inventaron los parásitos!
Parásitos y propóleo
Amplio espectro
Parasitosis: la “nueva” epidemia olvidada
Prevención de infecciones parasitarias
Cómo saber si estoy parasitado
Desparasitado genérico
Arsenal antiparasitario

CAPÍTULO 7: ¿POR DÓNDE EMPEZAR?

Limpiar y no ensuciar
El camino de salida
Evacuar con criterio
Tipos de desechos
Los cristales
Los coloides

PAQUETE DEPURATIVO BÁSICO

Limpiar
Limpieza intestinal y hepática
Desparasitado
Preparados depurativos
- Tónico Herbario
- Baplaros
Reposo digestivo
No ensuciar
Alimentos que curan, alimentos que matan
Los alimentos ensuciantes
Los alimentos fisiológicos
¿Con esto basta?
¿Objetivo o yapa?

APÉNDICE

Masaje de zonas reflejas
Limpieza intestinal con agua salada
Recomendaciones nutricionales
La técnica
Los movimientos
Limpieza hepática profunda
Los seis días preparatorios
El día de la limpieza
Fermentación casera de hortalizas
Chucrut, recetas clásica y rápida
Yogurt de repollo
Otras fermentaciones de hortalizas
Cultivo casero del kéfir
Preparación del kéfir de agua
Preparación del kéfir de uva
Conservación de los nódulos
Listado de terapeutas colónicos
Bibliografía consultada
Acerca del autor